ACTIVIDAD 2. EDUCACIÓN Y TRABAJO EN ESPAÑA

 Hoy, en esta entrada del blog hablaremos sobre la educación y el trabajo. Se trata de una reflexión personal a raíz de un artículo propuesto en clase (lo podéis encontrar pinchando aquí).

Ya desde pequeños crecemos sabiendo que, a grandes rasgos, el desarrollo de nuestra vida va a ser: nacer → estudiar → trabajar → jubilarse (si hay suerte) → morir. Quizás, sea una visión un poco pesimista y corta de miras de la vida, pero todos podemos estar de acuerdo en que desde la infancia la pregunta en qué quieres trabajar está a la orden del día. Claro, cuando eres niño siempre está la típica respuesta de "cantante" o "astronauta" pero según vas creciendo y vas obteniendo una perspectiva más realista comprendes que la respuesta que dabas era simplemente un sueño infantil, para la mayor parte de la gente y muy difícil de alcanzar.

Con el avance y desarrollo de las nuevas tecnologías han ido surgiendo nuevos trabajos que hace 10 años eran impensables. Por ejemplo, a nadie se le hubiera ocurrido que las empresas sustituyesen las vallas publicitarias o los anuncios de la tele por los influencers de las redes sociales, y se trata, increíblemente, de un mundo que mueve millones. Yéndonos a trabajos más técnicos encontramos a los analistas en big data, desarrolladores de videojuegos o muchos otros. Y no sabemos aquellos que están por aparecen en un futuro no muy lejano.

Por ello, viendo la velocidad a la que evoluciona la tecnología y a la imperiosa necesidad que tiene el ser humano de adaptarse a ella, es absurdo pensar que la mayor parte de los trabajos van a permanecer invariables a lo largo del tiempo. Incluso en trabajos que a priori no tienen relación con la tecnología, por ejemplo, en la agricultura, debido al avance industrial y tecnológico hay tractores que pueden realizar ciertas tareas sin necesidad de un conductor gracias al GPS. Toda esta revolución tecnológica hace que las empresas ya no busquen únicamente al mejor de la clase sino a gente con diferentes habilidades bien sociales, puesto que cada vez se trabaja más en equipo, o de adaptación a los diversos cambios que se van generando.

Hasta ahora, la creencia tradicional era que aquel que estudiaba siempre se garantizaba un mejor futuro, asociado a un buen empleo, a un mayor sueldo y a una mejor posición social. Pero eso ya no es cierto.  A la vista de los últimos datos, la universidad es una gran fábrica de parados, incapaces de encontrar un trabajo asociado a su formación. ¿Y a qué puede deberse esta situación? A la criticada, y en gran parte cierta, falta de relación entre las empresas y los grados. La formación ofrecida en las distintas titulaciones y el mundo laboral demandado por la sociedad dista mucho de estar en consonancia. Se trata de una formación teórica, escasa en prácticas, muy monolítica donde debieran interactuar diferentes formaciones ya que la sociedad laboral es heterogénea. 

Es indudable que el paso por la universidad garantiza una formación pero deben erradicarse las ideas de que el trabajo posterior va a estar relacionado con la carrera estudiada y que nos garantizará un trabajo, ya que hay un gran desfase entre la universidad española y la realidad laboral. 

Sirva como ejemplo de las alteraciones sufridas en el mercado laboral mi propio grado. Hará unos 20 años, los estudiantes de matemáticas estaban destinados a la docencia, mientras que actualmente es uno de los grados más demandados, siendo la salida de la docencia mínima y predominando la consultoría. Sin embargo no podemos valorar como excelente el mundo científico, dejando de lado la parte humanística que toda formación debe tener, ya que el hombre es un ser social por naturaleza.

¿Y vosotros qué opináis? Os leo en comentarios...